La primera vez que me planteé viajar a Canadá tenía en mente visitar solamente la parte oeste. Sin embargo, me fue imposible escapar a una escala de conexión de 13 horas en la principal ciudad del país, en el este, por lo que la transformé en una pequeña ruta. Hoy quiero recomendarte varias cosas que hacer en Toronto en este post, tanto si vas a pasar por la ciudad rápidamente como yo como si planeas quedarte varios días para disfrutarla con calma.
Antes de comenzar, si tienes una escala en Toronto lo primero que quiero que tengas en cuenta es que solamente merecerá la pena salir del aeropuerto si tienes una parada larga. Yo diría que si tienes menos de 5 horas no merece la pena, teniendo en cuenta los tiempos de ida y vuelta entre el aeropuerto y el centro, y que tendrás que estar con antelación suficiente en el aeropuerto para pasar los controles de seguridad antes de tu vuelo (unas 2 horas). En mi caso la escala en Pearson fue de 13 horas en mi viaje de Edmonton a Barcelona, por lo que pude aprovechar bastante bien el día.
Cosas que hacer en Toronto
Siendo la mayor ciudad de Canadá es evidente que hay muchas cosas que visitar en Toronto. Es sobre todo una ciudad cultural, con numerosos museos, monumentos icónicos, arte urbano y mercados bulliciosos, aunque también hay espacio para la naturaleza, pues no hay que olvidar que se levanta a orillas de un enorme lago.
Debido a que solamente visité la ciudad durante un periodo corto de tiempo no pude conocer de primera mano todo lo que te reseño. Visité la CN Tower, el Museo del Ferrocarril, el distrito financiero y las Toronto Islands. No obstante, he querido mencionar todo lo demás para que tengas una idea de todo lo que te espera en Toronto. Si pensabas que no tenía mucho por ver, ¡te equivocas!
Realizar una visita guiada por Toronto
Para tomarle el pulso a la ciudad, una de las cosas que puedes hacer en Toronto es una visita guiada o un free tour. Si vas a estar varios días y la realizas el primero, sabrás ubicarte mejor y el guía te dará muchísima información sobre la historia de la ciudad y las cosas que puedes realizar durante el resto de tu viaje.
Subir a la CN Tower
Toda visita que se precie a Toronto debe incluir una parada en la CN Tower, el gran símbolo de la ciudad. Con sus 553,33 metros, es la torre más alta de América y fue durante muchos años la torre más alta del mundo. La mayoría de servicios de este popular monumento se encuentran en la zona del primer mirador (Lookout). Se encuentra a 346 metros y la vista 360º que ofrece de Toronto es magnífica. Desde aquí se puede ver… ¡Torontontero! 😀
Dejando a un lado las bromas, la vista te dará una buena idea de la magnitud de la ciudad. Por un lado, verás claramente la diferencia entre el Downtown, con sus rascacielos imposibles, y la periferia, con sus casitas alineadas perfectamente en avenidas rectas interminables. Por otro, verás el lago Ontario, tan grande que podría confundirse con el mar.
Un poco más abajo del nivel de este primer mirador se encuentra el suelo de cristal. Aquí puedes poner a prueba tu vértigo, ya que situándote en el cristal, tendrás la sensación de estar caminando por el aire a 342 metros. En esta área también existen restaurantes y la opción de realizar el Edgewalk, un paseo con arnés por fuera del mirador a 356 metros de altura.
El segundo mirador (Skypod) se encuentra más arriba aún y se accede en un ascensor diferente al del mirador principal. Se sitúa nada más y nada menos que a 447 metros, siendo la plataforma de observación más alta de Norteamérica.
Entradas para la CN Tower de Toronto
Para poder visitar la CN tendrás que sacar tu entrada (y te advierto que no es barata). Existen dos entradas diferentes: una para subir solo al primer mirador (Lookout) y otra que incluye también el segundo (Skypod). La primera cuesta 43C$ y la segunda, 50,50C$. Mientras, si te animas a realizar el Edgewalk éste cuesta 195C$.
Visitar alguno de los museos de Toronto
Toronto es una ciudad eminentemente cultural, por lo que hay muchos museos que merece la pena visitar. En ellos encontrarás arte e historia, algunos en edificios emblemáticos y otros con un estilo totalmente vanguardista.
Frente a la CN Tower se encuentra el Museo del Ferrocarril. Éste me lo encontré por casualidad, ya que una parte es al aire libre y se pueden ver algunas locomotoras y vagones antiguos. Es curioso que el mantenimiento de estos, que son parte de la historia del transporte de la región de Ontario, sea realizado por voluntarios. Dentro del edificio está la otra parte del museo donde se pueden ver objetos, uniformes y conocer más detalles sobre la historia del ferrocarril.
Si te gusta la pintura no te puedes perder la Galería de Arte de Ontario. Es uno de los museos de arte más notables de Norteamérica y la arquitectura de Frank Gehry lo convierte también en una localización muy fotografiada en la ciudad canadiense. Allí podrás ver cuadros de grandes artistas europeos, como Rubens o Rembrandt, pero también profundizar en el arte nacional conociendo por ejemplo las obras de las pintoras Emily Carr, Helen McNicoll o Mary Hiester Reid. Puedes conseguir tu entrada online aquí.
También muy interesante es el Royal Ontario Museum o Museo Real de Ontario, un gran museo con más de 13 millones de piezas que repasan la cultura, el arte y la naturaleza de la región a lo largo de 40 galerías y espacios expositivos. Si quieres conseguir tu ticket, haz clic aquí.
No muy lejos de allí se encuentra uno de los museos más curiosos que visitar en Toronto: The Bata Show Museum. Este peculiar museo repasa la historia del calzado, desde las sandalias egipcias hasta las deportivas de hoy en día pasando por diseños de lo más extravagante e icónico. Si te gusta la moda, sin duda, no te lo puedes perder. Aquí puedes conseguir tu entrada.
Ya fuera del centro de Toronto podrás visitar el Aga Khan Museum, un museo dedicado al arte y la cultura islámica, y Casa Loma. En este último caso se trata de un castillo de comienzos del siglo XX que acoge numerosas exposiciones, desde coches antiguos a las películas que se han rodado allí, pudiendo explorar además las estancias y mobiliario del propio edificio. Puedes adquirir tu ticket aquí.
Conocer los dos ayuntamientos de Toronto
Como toda ciudad importante, Toronto tiene su distrito financiero. Situado en el corazón del Downtown, lo reconocerás por los altísimos rascacielos donde tienen sede las grandes entidades y corporaciones canadienses e internacionales. La calle más representativa es la Bay Street, donde se encuentran los grandes bancos y la Bolsa, y a través de la cual se llega también al centro político de la ciudad en el cruce con la Queen Street: sus ayuntamientos.
Toronto tiene dos ayuntamientos, aunque sólo uno de ellos está operativo como tal. El antiguo es un edificio del año 1899, mientras que el nuevo se construyó prácticamente al lado en la década de los 60. A mí personalmente me gusta más el viejo. Es algo así como una reliquia con personalidad en un lugar en el que los rascacielos lo han ocupado todo, perdiendo, bajo mi punto de vista, esa esencia antigua que nos cuenta la historia de los lugares.
Ambos se sitúan en la plaza Nathan Phillips Square, que es sin duda uno de los lugares más concurridos de la ciudad. Allí verás las emblemáticas letras de Toronto y en invierno te encontrarás con una pista de patinaje sobre hielo.
Visitar Yonge-Dundas Square
También en el corazón del distrito financiero y a pocos pasos de los consistorios está la plaza Yonge-Dundas Square. Te encontrarás con que es una plaza totalmente diferente, llena de comercios y anuncios publicitarios que por la noche la convierten en una explosión de colores de neón. Sería algo así como el equivalente a Times Square en Nueva York, Shibuya en Tokio o Picadilly Circus en Londres.
Darte una vuelta por sus mercados y barrios históricos
Además de disfrutar de sus plazas, edificios y rascacielos, otra de las cosas que visitar en Toronto son sus mercados y barrios más sorprendentes. Existen varios repartidos por la ciudad, aunque entre los más visitados están Kensington Market, The Distillery Historic District o el Mercado de St. Lawrence.
El Mercado de St. Lawrence (o St. Lawrence Market) se ubica en un edificio histórico de 1850, levantado tras el incendio que asoló la ciudad (y el anterior mercado) unos meses antes. Se trata del lugar donde tradicionalmente estaba el mercado y hoy en día sigue funcionando como tal además de habérsele añadido nuevas tiendas de artesanía, antigüedades, souvenirs y restaurantes.
Por su parte, el Distillery Historic District es un moderno espacio de ocio surgido de las entrañas de la antigua destilería Gooderham & Worts Distillery. Los antiguos edificios acogen hoy en día numerosos restaurantes y cafeterías, actuaciones en vivo y tiendas de todo tipo, siendo uno de los rincones más animados de la ciudad para salir de comprar o a tomar algo. Si quieres conocer su historia y arquitectura victoriana industrial, puedes unirte a un walking tour por allí.
Al otro lado del centro de Toronto se sitúa Kensington Market, que no es un mercado, sino el epicentro bohemio y cultural del momento. Esta zona de la ciudad siempre fue un barrio de trabajadores inmigrantes y se ha convertido en una de las zonas más cosmopolitas de toda la ciudad, lindando con barrios como Chinatown, Koreatown o Little Italy. Sus casas bajas, algunas aún de estilo victoriano, acogen numerosas tiendas, cafeterías, galerías de arte y coloridos murales, y puedes recorrerlo también con un tour guiado si lo deseas.
Navegar a las Toronto Islands
Frente al Downtown de Toronto existen una serie de islitas que emergen de las aguas del lago Ontario. Son uno de los lugares más populares entre los locales, ya que son ideales para pasar un día de relax y hacer deporte: montar en bici, ir a la playa, salir a navegar… Es, por tanto, otro lugar imprescindible que ver en Toronto.
Las islas de Toronto tienen para los visitantes dos atractivos añadidos diría yo. Por una parte, porque para ir hay que tomar un barco de estilo antiguo con mucho encanto que te transporta a la época de las grandes naves de vapor. Por otra, porque desde aquí se tienen unas vistas espectaculares del SkyLine de Toronto. Para ir puedes tomar los ferris que salen de la terminal Jack Layton y estos son los horarios.
Visitar las Cataratas del Niágara
Si tienes varios días para visitar la ciudad, entonces tienes que ir a ver las Cataratas del Niágara. Se trata de una impresionante cascada de 51 metros de alto en el río Niágara, que marca la frontera entre Canadá y Estados Unidos. Es una de las atracciones más visitadas del país (si no la que más) y es posible visitarlas cómodamente en una excursión de día completo desde Toronto.
Para ello hay varias modalidades. La más básica incluye el transporte hasta Niagara-on-the-lake y un paseo guiado por algunos de los puntos más importantes de la localidad en la que se ven las cataratas. Durante el verano puedes hacer la excursión a las Cataratas del Niágara con crucero para ver más de cerca la caída de agua, mientras que en el invierno, como no hay crucero por las frías temperaturas, se puede visitar de forma opcional la Torre Skylon, una plataforma de observación al estilo de la CN Tower para observar la cascada desde más de 200 metros de altura.
Dónde está Toronto y cómo llegar
Toronto es la principal ciudad de Canadá. No es su capital, pero sí la urbe más grande y más poblada del país. Se sitúa en la provincia de Ontario, junto al lago del mismo nombre y muy cerca de otras ciudades canadienses importantes, como Ottawa, Montreal y Quebec. Además, su ubicación junto a la frontera con Estados Unidos hace que también sea fácil llegar desde ciudades como Chicago o Nueva York.
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Vuelos a Toronto
La forma más común de viajar a Toronto es hacerlo en avión. El aeropuerto internacional de Toronto Pearson es el más importante de Canadá y uno de los más transitados del mundo, y se sitúa en la vecina ciudad de Mississauga. Hasta allí llegan vuelos de todas las partes del mundo.
El aeropuerto de Toronto está en una ciudad vecina, pero no está muy lejos del centro de la ciudad (el Downtown u Old Toronto). La estación principal del Downtown de Toronto es Union. Ir hasta ella puede ser complicado porque la red de transporte es un lío monumental. Sin embargo, he intentado simplificártelo al máximo y aquí te dejo las dos opciones principales para moverte entre Pearson y Union.
UP – Union Pearson Express
La primera opción es tomar el tren llamado UP (Union Pearson Express). Es el medio más rápido, pero también es algo más caro que moverte en el transporte público de toda la vida. El trayecto a Union son 25 minutos y el ticket de adulto es de 12,35C$ ida o 24,70C$ ida y vuelta.
Autobús urbano + metro
La alternativa en transporte público es realizar una combinación de autobús y metro, gestionados por la TTC (Toronto Transit Comission). Al ser transporte público es la opción más barata, pero lleva más tiempo.
Primero debes tomar el bus número 900 (Airport Express TTC) hasta su parada final, que es Kippling. Aquí es donde enlazas con la red de metro. Toma la línea 2 dirección Eastbound hacia Kennedy Station. Puedes relajarte, porque tendrás por delante 15 paradas. Bájate en St. George Station y cambia a la línea 1 dirección Northbound hacia Finch Station. La sexta parada será Union.
Con esta opción tardarás entre 1 hora y 90 minutos, dependiendo de los transbordos. No se puede pagar en los transportes (es decir, no le puedes comprar el billete al conductor del autobús), sino que tendrás que comprar una tarjeta PRESTO antes de acceder al vehículo. Las puedes comprar en las máquinas del aeropuerto junto a la parada de autobús y hay de un viaje (one-ride ticket – 3,20C$), dos viajes (two-ride ticket – 6,50C$) o para un día completo con viajes ilimitados (day pass ticket – 13,50C$).
Elegir una u otra opción dependerá de tu presupuesto y de tu tiempo. Si tienes una escala relativamente corta, yo optaría por el UP. Si, por el contrario, puedes tomártelo con tiempo, te animaría a probar el transporte público porque te acercará más a la gente local y vivirás por un día su realidad. Dicho esto, ambas opciones son totalmente seguras. ¡No te olvides de que estás en Canadá!
Tren y autobús a Toronto
Si ya estás viajando por el país haciendo una ruta por el este de Canadá, además de volar tienes la opción de moverte por tierra. Una buena manera de viajar entre ciudades es tomar el tren de Via Rail, la compañía que opera en Canadá. Yo lo he utilizado en algunas rutas por la zona y es cómodo y económico si compras tu billete con tiempo.
Si no te convence, también hay posibilidad de viajar en autobús. Hay algunas empresas que conectan las ciudades de la región, como Flixbus, que tiene rutas desde Ottawa o Nueva York, o Megabus, que viaja desde Ottawa o Montreal.
Después de conocer todas estas cosas que hacer en Toronto que te acabo de contar, espero que te animes a visitar la ciudad, ya sea durante varios días o en una escala que tengas en tu viaje como hice yo. A mi personalmente me gustan más otras ciudades de Canadá y sus espacios naturales, pero sin duda tiene rincones curiosos e históricos que te gustará conocer.
Este artículo pertenece a la guía para viajar sola a Canadá
Viajera y fundadora de #QuieroViajarSola. Desde que comencé a viajar sola en 2016 siempre tuve una inquietud: motivar a otras mujeres a viajar solas. Para ello, decidí crear este blog en 2018, en el que te cuento todos los viajes que he realizado en solitario en estos casi 8 años como viajera independiente y te doy consejos para que puedas organizar tu viaje por libre y disfrutar recorriendo el mundo en solitario.
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sabes creo que queda muy claro todo ,como conocer la ciudad, y poder guiarte con los tips que nos das , te felicito por los datos otorgados, excelente, felicitaciones ¡¡¡¡¡¡¡¡
¡Muchas gracias, Sandra!
Me alegro de que la guía sea útil y te ayude a planificar tu viaje a Toronto.
¡Disfruta mucho!