Posee uno de los barrios judíos mejor conservados de España y esconde muchos secretos entre sus callejuelas empedradas. Es, sin duda, una de las visitas imprescindibles que hacer en el norte de Cáceres, así que hoy voy a contarte qué ver en Hervás. Lo visité en septiembre de 2024 y aquí te guío por la ruta que yo hice por su casco histórico. ¡Toma nota!
Qué ver en Hervás
La localidad de Hervás surge en torno al siglo XII, cuando los templarios edifican una ermita que posteriormente se convertirá en castillo. Gracias al paso de la Vía de la Plata, poco a poco se fue fijando población en este entorno, acogiendo a una gran comunidad judía bajo el amparo del Señor de Béjar. Muchos de ellos se quedaron tras la expulsión de los judíos en 1492 como conversos y, gracias a ello, hoy Hervás es Conjunto Histórico Artístico con un montón de rincones interesantes.
Plaza de la Corredera
La Plaza de la Corredera es un buen punto de partida para comenzar a recorrer la parte vieja de Hervás. En el centro encontrarás una fuente del siglo XVI y parte de la plaza se compone de edificios porticados.
En esos soportales hay varios comercios y bares con terraza, por lo que también es un buen punto de finalización de ruta para reponer fuerzas después de la visita.
Iglesia de Santa María de Aguas Vivas
Callejeando llegarás a la iglesia de Santa María de la Asunción de Aguas Vivas, situada en la parte más alta del pueblo. Esto hace que desde allí se tengan unas impresionantes vistas del pueblo y de las montañas y bosques del entorno, así que te recomiendo pararte unos minutos a contemplar el paisaje.
Esta iglesia se terminó de construir en el siglo XVII y se hizo sobre los restos del antiguo castillo, por lo que aún hay partes visibles de éste. No pude entrar al interior porque estaba cerrada, pero si está abierta no dudes en entrar a echar un vistazo.
Barrio judío de Hervás
La joya de Hervás es su barrio judío, que suele mal llamarse judería. Las juderías solían ser barrios cerrados, pero en el caso de Hervás era una zona abierta, de ahí que siempre fuese un barrio más de la localidad.
Paseando por sus estrechas calles vas a ver montones de edificios que aún conservan la arquitectura tradicional de la zona, con sus edificios de tres alturas levantados en piedra, ladrillo y adobe, y rematados por entramados madera y, en algunos casos, recubrimiento de tejas, que servían para repeler el agua de la lluvia y proteger las fachadas.
Aunque hay enclaves históricos que ya no se conservan, como la sinagoga, sí que se mantienen aún la casa del rabino o la Cofradía, edificio que utilizaron los judíos para congregarse después de su conversión al cristianismo. Si tienes tiempo, te recomiendo hacer un tour guiado porque conocerás muchos detalles sobre la historia de este barrio.
Patio de los cactus
Escondido entre el barrio judío (calle Cuesta) te encontrarás con un rincón de lo más peculiar: un jardín de cactus. Se trata de una iniciativa de Antonio, un vecino de Hervás al que le apasionan estas plantas.
Plantados en macetas de todos los tamaños, conchas o dedales, poco a poco ha logrado una colección de más de 7.000 cactus que tiene en la puerta de su casa. Este peculiar museo es de acceso libre, aunque puedes dejar la voluntad para ayudarle a mantenerlo.
Puente de la Fuente Chiquita
Caminando unos pasos más hacia el río Ambroz, llegarás hasta el monumento más antiguo de Hervás. Se trata del Puente de la Fuente Chiquita, que toma su nombre de una pequeña fuente a un costado, que aún se conserva y da agua.
El puente es muy sencillo. Realizado con sillería granítica, está formado por un sólo arco. Antiguamente era la principal vía de conexión de Hervás con la Vía de la Plata, que pasaba cerca del municipio.
El Vado
Partiendo de la Fuente Chiquita, podrás seguir el curso del río pasando por El Vado, donde se encuentran algunas de las casas judías más antiguas de Hervás. Allí había dos bodegas y también estaba el hospital, que después del edicto de expulsión fue administrado por la cofradía conversa.
Hoy en día, además de ser un paseo agradable, esta zona es el escenario de los teatros de «Los Conversos», un festival cultural que se celebra a principios de julio cada año. En él, se revive la historia judía de la localidad con actuaciones escénicas y musicales, degustaciones gastronómicas, mercadillos…
La calle más estrecha de España
Cuando camines por la calle Rabilero mantén los ojos bien abiertos. ¿Por qué? Porque si no, es posible que te pierdas la Travesía del Morón, que es la calle más estrecha de España.
Con apenas 50 centímetros de ancho y cubierta por una casa, comunica en forma de pasadizo la calle con la entrada de una vivienda en la parte final. La reconocerás no sólo por su tamaño, sino también por el cartel que anuncia que, efectivamente, esa es la calle estrecha que todo el mundo busca.
Como es un rincón estrecho y oscuro, este callejón de Hervás dio lugar a numerosas leyendas. Aunque muchas se van perdiendo con el tiempo, hoy en día sigue habiendo algo de superstición en este lugar, y es que también se le conoce como «Callejón de los Enamorados», ya que mucha gente se da un beso allí para sellar su amor.
Iglesia de San Juan Bautista
Al salir del barrio judío, te recomiendo dirigirte hacia la iglesia de San Juan Bautista, ubicada en el antiguo Convento de los Trinitarios. La fachada de la iglesia está decorada en color carmesí y es una réplica de la portada de la iglesia de San Nicolás de Valladolid.
Se puede visitar por dentro y, si quieres iluminar el retablo para apreciar las obras de arte, debes introducir una moneda de 1€ (y ojo, la iluminación dura poco). El resto del antiguo complejo monástico es ahora la Hospedería Valle del Ambroz.
Qué ver en los alrededores de Hervás
Si te quedas con ganas de más, puedes continuar tu ruta visitando otros pueblos de la zona. A continuación te propongo algunos planes que creo que te van a gustar, aunque también te recomiendo moverte a tu aire y explorar cualquier rincón que te llame la atención. ¡Hay mucho que ver cerca de Hervás!
Granadilla
A pocos kilómetros de Hervás tienes Granadilla, un pueblo amurallado de origen medieval que, aunque conserva su castillo y murallas, fue abandonado tras la construcción de un pantano. Tiene una historia de lo más curiosa, y es que ahora ha vuelto a la vida gracias a un proyecto educativo.
Las antiguas casas se están restaurando para acoger a chavales de diferentes institutos de España que llegan hasta aquí para pasar una semana aprendiendo diferentes labores. Sin duda, una gran opción para dar una segunda oportunidad a un lugar con historia.
Ciudad romana de Cáparra
También por la zona puedes visitar las ruinas de la antigua ciudad romana de Cáparra. Aún se vislumbra su foro, sus termas o su calzada romana, que era parte de la Ruta de la Plata. El arco, que es de lo poco que se mantiene en pie, se ha convertido en su monumento más reconocible. Si quieres visitarlo, puedes unirte a una visita guiada para conocer toda la historia de este lugar.
Plasencia
Siguiendo hacia el sur, llegarás a Plasencia, una ciudad pequeña que guarda mucha historia. Aunque hubo asentamientos anteriores, su fundación se data en 1186, cuando el rey Alfonso VIII de Castilla les conquistó el territorio a los almohades.
La ciudad prosperó en época medieval y proliferaron los palacios de nobles y edificios monumentales, como sus dos Catedrales o su muralla. Fue testigo de acontecimientos históricos importantes, como la boda de Juana la Beltraneja, y por ello te recomiendo realizar un tour guiado, para no perderte nada.
Ya ves que hay un montón de planes que hacer en Hervás en un día, ¡y también en sus alrededores! Así que mi consejo es que aproveches para visitar varios lugares de la zona y llevarte así un gran recuerdo de la historia y los paisajes de esta zona de la provincia de Cáceres.
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Viajera y fundadora de #QuieroViajarSola. Desde que comencé a viajar sola en 2016 siempre tuve una inquietud: motivar a otras mujeres a viajar solas. Para ello, decidí crear este blog en 2018, en el que te cuento todos los viajes que he realizado en solitario en estos casi 8 años como viajera independiente y te doy consejos para que puedas organizar tu viaje por libre y disfrutar recorriendo el mundo en solitario.
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